domingo, 3 de julio de 2011

La Vieja Del Bar


     La mujer del bar es una vieja de pelo blanco, huesuda, grosera y de aspecto hombruno. A veces, llevando yo la intención de entrar a tomar algo, desisto al verla allí dentro, prefiero tomarlo en casa. 

     La mujer del bar siempre está enfadada, o lo parece. Su tono de voz es áspero y alto, para mí es muy desagradable.

     Tiene, además, la mujer del bar, la estúpida costumbre de decir el nombre de su interlocutor en cada frase, como para darle un tono de complicidad, otra cosa que no soporto. 

     La mujer del bar habla y habla, no le importa ser escuchada, da esa impresión. Comenta el programa de la tele, habla del gobierno, sería capaz de hablar de mecánica cuántica si supiese que eso existe...

     Una vez hablé con ella (bueno, ella habló, dirigiéndose a mi) y tal vez fue mi cara lo que la hizo recular, porque ahora apenas me saluda. Brindo cien veces por ello, no me hables, te lo suplico.

      Mariano, el dueño del bar, un tipo encantador que es amigo de todos porque sabe escuchar, llegó a perder la paciencia un día, delante de mi. La vieja del bar siempre calcula mal lo que beben, ella y sus acompañantes o compañeros o aliados o camaradas o lo que sean... el caso es que Mariano, harto ya, le dijo: "¡Vete y no vuelvas, no te quiero ver más por aquí!". Yo me marché rápidamente, odio esas escenas, pero me alegré de que Mariano sacase los cojones delante de esa momia.

     Estuvo unos meses sin aparecer por el bar, Mariano me dijo que estaba de vacaciones (le pregunté por ella), pero no me lo creí. Mejor que no vuelva, pensé y brindé por ello.

    Pero la mujer del bar ha vuelto otra vez, lo de las vacaciones resultó ser verdad.


   Hoy, la vieja momia criticaba a Nadál, porque estaba perdiendo Wimbledon... le insultaba, le menospreciaba, vieja zorra estúpida, qué sabrás tú... 

     No me dejéis terminar así, por favor. No quiero terminar siendo el viejo del bar... 

3 comentarios:

  1. Pesad@s hay en todos los lados.... quizás nadie le ha dicho a la cara como es ella.... ya sabes... más vale 1 vez colorado que 100 amarillo!
    magnética (no puedo comentarte, me da error)

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  2. Pues no seré yo quien se lo diga, seguramente no me haga ni caso y me coja más manía, pero gracias por la sugerencia y por comentar.

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  3. Amo a la vieja del bar, y Mariano también.

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