Estoy CASI seguro de lo que voy a decir a continuación.
Cuando uno escribe cosas que se inventa, es inevitable que coja modelos de su vida, una situación concreta, un nombre, un sitio...
Ya sea escrito en serio o en broma, para hacer reír o para intentar llegar al corazón, siempre hay algo de uno mismo, yo personalmente no lo puedo evitar.
Ahora bien, amigos...
Nadie de los que salen retratados (a brochazos, diría yo) en mis extravagantes escritos existe, nadie. Ni de lejos. Ni los malos ni los buenos. De hecho, los malos son menos malos y los buenos menos buenos en la vida real, este es mi mundo de locura donde escribo lo que quiero y dejo (con mucho gusto) que la gente comente.
He escrito burradas y tonterías demasiado tontas hasta para mi, pero he quitado pocas cosas. Lo hecho, hecho está, yo soy así.
Un par de ejemplos (o seis, ya veremos):
Conocí a un Edelmiro, buen chaval, cuando yo trabajaba en notarías, hace apenas 30 años. Era mayor que yo, o sea que de chaval ya no tiene nada.
Hay un post titulado Edelmiro y lo único que tiene de real es lo que acabo de decir. Lo único. Es un post absurdo, claro, pero algún nombre tenía que poner.
Es verdad que somos ocho hermanos, cinco chicos y tres chicas y que yo soy el séptimo. Pero de verdad os lo digo (aunque no me creáis) que no los mate a todos con un hacha. Ni siquiera a mi padre.
Realmente, el post de Scalextric es de los más reales, pero creo que eso se nota.
Y ya está; las chicas que conozco son todas muy majas, de verdad, no tengo nada contra vosotras. Os quiero a mi manera. Si os veis reflejadas en mis delirios escritos, hacedlo con sentido del humor, con cariño y con tolerancia, porque NO SOIS VOSOTRAS. Este es mi mundo, nada es real.
